Queridas hermanas, queridos hermanos,
Junta Islámica quiere, tras el inicio del mes de Ramadán, recordar la feliz coincidencia que, de nuevo, ocurre este año. En la misma luna coincidirán las tres festividades religiosas más importantes de las confesiones abrahámicas: Ramadán, el Pesaj judío y la Pascua de Resurrección cristiana.
Son tiempos estos de meditación, de práctica y de misericordia en un mundo un tanto sordo. Cuando otros instrumentalizan la religión, deberíamos aprovechar estas coincidencias como hijos de Abrahán para intentar hacer la fraternidad sobre la que se fundan nuestras respectivas tradiciones. Unas tradiciones de las que nosotros participamos y no podemos olvidar lo que el Corán nos enfatiza:
Y este es el argumento que dimos a Ibrahim contra su pueblo. Elevamos el grado de quien Nosotros queremos. Ciertamente Tu Señor es Sabio. Y Nosotros le otorgamos a Ishaq y a Yaqub, a ambos guiamos. Y a Nuh ya lo guiamos antes y a su progenie: Dawud, Sulayman, Ayub, Yusuf, Musa y Harun. Y así es como Nosotros recompensamos a quien está en la excelencia. Y a Zakariyya, Yahya, ‘Isa y Ilyas. Todos ellos estaban entre los justos. Y a Ismail, Ilysa‘, Yunus y Lut. Y a todos, Nosotros les agraciamos entre todos los mundos. Y así como sus padres, progenie y hermanos, a e ellos Nosotros escogimos y les guiamos por el recto sendero. Esta es la guía de Allah, Él guía por ella a quien quiere de los que le reconocen Mas si hubieren sido idólatras que vano hubiera sido lo que construyeron. A estos son a los que Nosotros les dimos el Libro, la Sabiduría y la Profecía, pero si fueran cafres, Nosotros se lo confiaremos a otro pueblo que no sea zafio. A estos son los que guio Allah, así que ¡sigue esa dirección! Di: «¡No os pido recompensa alguna por esto, tan solo es un recuerdo para todos los Mundos!». (Corán, 6: 83-90)
Nuestra entidad tan implicada en el diálogo interreligioso y en el movimiento Espíritu de Córdoba siente que este es un momento muy bello para reforzar esos lazos y encontrarnos en los lugares comunes para construir un mundo mejor desde los valores que compartimos. Por ello, no podemos sino felicitar a la FCJE con un Pesaj Alegre y a la Iglesia Católica y a la FEREDE con una Feliz Pascua de Resurrección.
Y es que, ciertamente, la herencia de Abrahán es encontrarnos libres, pero entregados al Altísimo, en torno al ágape en la mesa vacía, material o espiritual, que Él nos brinda tras el esfuerzo y la liberación. Él rompió los ídolos de su padre para liberarse y entregarse a un Dios con el que pacto un mundo mejor. Nosotros lo revivimos, bien esperando la partida de Egipto, la resurrección en una caverna o rompiendo el ayuno cuando no vemos el sol en el horizonte. Cuando en ese momento, al comer, hagamos la acción de gracias pensemos siempre en el oprimido, en el enfermo e incluso en aquellos que nos desprecian, pues estamos celebrando una liberación. Una liberación que a veces es más de nosotros mismos y nuestro ego que de los enemigos.
En Córdoba a 2 de Ramadán de 1444h / 24 de marzo de 2023.